Uno de los aspectos que nos suelen preocupar en el día a día es qué es lo que mejor podemos poner en nuestra mesa a la hora de cocinar y tener un plato elaborado. Las prisas y la mala organización o falta de ideas puede que nos lleven a terminar cocinando cada vez menos y con menor calidad en los productos que elaboramos.
Quizá la necesidad de pararnos a ver a nuestro alrededor con mayor detenimiento, nos haga cambiar hábitos y mejorar nuestra calidad de vida.